La vida es frágil y no es fácil, es como un torrente, un río desbordado, y ahí, llegamos como pescados buscando nuestro rumbo. Aprendemos a sobrevivir y el arte es aprender también a saber vivir en este océano de vida en el que bajan troncos, piedras y hay olas y mareas, a veces a contracorriente con días soleados y otros con tempestades arrasadoras que nos agitan y nos hacen cuestionar.
Sin embargo, podemos aprender a nadar, a flotar y podemos descubrir muchas cosas. La felicidad tiene que ver con ver la vida como es, desarrollando el guerrer@ interno, potenciando y reforzando tu autoimagen, tu propio autoconcepto, tu propia autoeficacia, incrementando la confianza en ti, conociendo profundamente tu persona, en tus habilidades, torpezas y competencias. Desaprender para seguir aprendiendo. Darte gusto y mirarte al espejo y sentirte bell@, inventando y tejiendo tu propia moda, tu propio estilo, tu propio traje, sin castigarte, ni crear una estructura interna tan exigente y dura, que te cause conflicto, y no te deje ser autocompasivo. Siendo realista, cuidándote, y sin ponerte etiquetas.
El éxito no es ganar, es intentarlo hasta el final con todo tu ser, aunque experimentemos miedo. Trata de disfrutar mientras te pones a prueba, puesto que lo importante no es las veces que te caes, sino las veces que te levantas. Lucho por lo que quiero, por lo que me gusta, pero soy sabia para ser capaz de dejar ir las armas, sobre todo cuando me doy cuenta que la batalla tal vez ya no es la mía.
Cuando termine el día, trata de autoelogiarte, autofelicitarte, mira y valora todo lo positivo de tu persona, tratándote con afecto, respeto y dignidad incrementa tu autoestima, y desde ahí es donde aprendemos a AMAR desde el presente y desde la LIBERTAD. Y recuerda, que tienes derecho a equivocarte, eres humano.
Haz de tu vida una obra de arte, empieza a quitar lo que no te sirve, lo que es dañino, lo que es peligroso, desaprende, descondiciónate. Deja de poner, quita y construye, pule tu propia estatua. Aprende a restaurar tus partes rotas, y agrégale a esas cicatrices plata u oro, moldea y eso que eres “tú” crea una obra de arte. Sin esconder, ni tirar, ni anular las roturas, todo lo contrario, exponlas, muéstralas sin vergüenzas y conviértelas en el arte de tu propia historia, de tu propia esencia.
Cada vez que tengas algo malo, transfórmalo, embellécelo, con aprendizaje…todo es cambiante, como el flujo del río, hoy estás de una manera y mañana de otra. Cada día cambiamos. En ese cambio construye tu propia vida, y tu sistema inmunológico será más fuerte.
Amerai Carrera

Terapeuta, facilitadora y formadora con experiencia establecida en Tantra, Neotantra y Sexualidad Consciente. Te acompaño a que conectes con tu auténtica esencia y te guío en un viaje mágico y sanador a lo más profundo del ser.
Te ofrezco mi guía por un camino ya vivido, por una senda que conozco y en la que te doy la mano.